Así como existen programas (emuladores) que permiten ejecutar en las computadoras personales los juegos fabricados originalmente para máquinas tragamonedas (arcade) o para consolas, existen también juegos que fueron lanzados hace varios años para las computadoras de entonces (PC, Amiga, Mac) y que aún resultan divertidos, ya sea por su ingenio o porque simplemente nos despiertan la nostalgia. Al respecto se ha aplicado el concepto de abandonware (en español sería "abandonaware") y se refiere a aquéllos juegos tan antiguos que no pueden encontrarse en tiendas (han dejado de comercializarlos), con lo cual (se asume) que no se está vulnerando ningún derecho al ponerlos a la libre disposición del público, ya que las propias distribuidoras han decidido dejar de darles soporte de todo tipo (descontinuarlos), para enfocarse a productos nuevos.
Aunque el concepto de abandonaware abarca a todo tipo de software viejo, incluyendo sistemas operativos, programas, aplicaciones y utilerías, son los juegos antiguos los que reciben más frecuentemente esa denominación. Casi todos siguen (en teoría) protegidos por el derecho de autor, ya que este concepto legal protege la propiedad intelectual (según las leyes de EU) hasta por 95 años. Sin embargo, muchos de los juegos fueron realizados por compañías que dejaron de existir o bien fueron absorbidas por otras compañías que terminaron por ignorar los trabajos previos y se enfocaron en desarrollar nuevos juegos aprovechando la experiencia del personal de la compañía que adquirieron. En pocos casos se ha reclamado la libre distribución de juegos anteriores, por lo que se ha hecho una práctica común entre los sitios especializados en el abandonaware.
No se debe confundir el abandonaware con el warez, ya que este último es una actividad ilegal porque involucra el uso de software actual o reciente mediante su modificación (hacking) o distribuyendo números de serie apócrifos, permitiendo así la copia o el uso gratuito de programas que tienen un costo. En el caso de los juegos nuevos, el warez implica hacer un parche o crack que permita utilizar gratuitamente un juego que aún sigue en venta por parte del fabricante. Por tal motivo, un juego no se considera abandonaware a menos que tenga más de cinco años en el mercado o que haya sido dejado de vender por un periodo de tiempo razonable (sin considerar los juegos de segunda mano o de remate, que siguen a la venta por periodos indefinidos).
La mayoría de los juegos disponibles en los sitios de abandonaware cumple con al menos uno de los siguientes criterios: la compañía que los desarrolló ya no existe y no transfirió los derechos a otra organización, o bien el propietario de los derechos dejó que éstos expiraran por ausencia de interés comercial. Muchos de los títulos disponibles corren sobre el sistema operativo DOS y algunos requieren de un programa adicional que permita ajustar la velocidad del procesador, pues en caso contrario corren muy rápido (fueron diseñados para computadoras más lentas). Dado que muchos de los juegos fueron muy conocidos o muy divertidos, despiertan gran interés entre los usuarios poder jugarlos nuevamente.
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